A fines de los años 80 y principios de los 90, la empresa Geveco S.A., dedicada a la fabricación de componentes para off road y vehículos de tracción integral, presentó un completo kit de carrocería para adaptar y equipar Jeeps usados.
A diferencia de otras iniciativas, este producto era el único que ofrecía techo rígido y portón trasero. Según el fabricante, la carrocería podía montarse y sacarse en sólo 5 minutos.
El kit construido integralmente en PRFV incluía paragolpes integrales, faldones laterales, fenders, completo tablero y barra antivuelco dentro de habitáculo. Podía aplicarse a cualquier tipo de Jeep.
El diseño se asemejaba a los vehículos japoneses de la época, en particular al Suzuki Vitara.
Geveco tenía el taller y salón de ventas en avenida Triunvirato 3466 en la ciudad de Buenos Aires.
No hay datos precisos sobre la cantidad de kits fabricados y unidades armadas.