Durango

Durango 4x4

Después de la guerra de Malvinas, el cierre de la apertura importadora, iniciada a fines de los setenta, dejó nuevamente libre el terreno para que los emprendedores argentinos dieran respuesta a los nichos de mercado que dejaban descuidados las grandes fábricas.

Eniak S.A., fabricante del Antique, apostó al desarrollo local de una pick up liviana de tracción integral, utilizando autopartes nacionales. Así nació, en 1986, la Durango 4×4.

Luis Gaggino, propietario de Eniak, contrató al experimentado diseñador Pedro Campo, quien ya había diseñado el auto deportivo Antique. Campo realizó la ingeniería y el diseño de la pick up a partir del casco del Volkswagen 1500, desarrollando un chasis y un sistema de transmisión especial, además de ofrecer un interior con cabina de diseño propio y un frontal remozado.

Para el chasis, se inspiró en el Range Rover y en el Mercedes-Benz G230, es decir, una estructura de perfiles de tubos rectangulares con travesaños también de tubo. Eso ofrecía la ventaja de ser rápido y económico para construir, además de liviano y rígido.

La suspensión delantera tenía cuatro tensores de los cuales los de abajo estaban vinculados haciendo de barra estabilizadora y una barra Panhard paralela a la de la dirección. Atrás, presentaba dos elásticos y una caja de transferencia inspirada en la del Fiat Campagnola que cumplía con una especificación del ejército italiano que establecía que con la primera de baja debía circular a menos de 5 km/h, la velocidad de los desfiles. En la Durango fue adoptada para lograr una gran multiplicación, que le permitiera trepar tranquilamente una pendiente de 45º.

La línea de montaje

Para la fabricación de las carrocerías se compraban a Autolatina juegos completos de carrocería del Dodge/VW 1500.  En la fábrica se montó un dispositivo que era una copia exacta del de la línea de producción, con soldaduras colgantes de puntos.

A las carrocerías se les mantenía el piso, se le cortaban los paneles, se les hacía una extensión detrás de las puertas delanteras y luego se cerraban. Las puertas originales se mantenían, por lo tanto, se garantizaba que abrieran y cerraran perfectamente y que los vidrios subieran y bajaban sin inconvenientes. El parabrisas era el original, es decir, que se lograba una cabina de pick up de serie.

La caja de carga estaba inspirada en la de la pick up Peugeot 504. Se construía íntegramente en chapa plegada con rodillo con los esquineros embutidos que le otorgaban una terminación muy profesional y prolija.

Eniak había desarrollado una verdadera línea de montaje para su fábrica del barrio porteño de Mataderos, donde se laminaban y soldaban las cajas, se pintaban las cabinas y luego se montaba todo el conjunto al chasis.

Durango 4x4 - Durango 1000
Durango 4×4 y Durango 1000. Las pick ups de Eniak.

El equipamiento era completo, incluía calefacción, aire acondicionado con compresor rotativo, radio AM/FM con pasacasete y dos parlantes incorporados en los paneles de puertas. El chasis reforzado contaba con espirales adelante y ballestas atrás.

La Durango 4×4 estaba equipada con el propulsor naftero Volkswagen de 1800 cc., opcionalmente, podía adquirirse con un motor diésel de 2,3 litros. La transmisión era Transax y podía ser intercambiada por un equipo Eaton.

Una amplia serie de opcionales permitían configurarla según la necesidad del usuario. Se ofrecía además una económica versión 4 x 2 que traía un motor VW de 1,5 litros. Hubo algunas que se compraron para hacer carreras en los médanos equipadas con motor Falcon.

La Durango podía andar perfectamente por campo traviesa superando vados de hasta un metro de agua. Esta cualidad fue reconocida por empresas públicas como DEBA (Dirección de Energía Eléctrica de la Provincia de Buenos Aires) que adquirió 25 vehículos para efectuar servicios en las torres de alta tensión sustituyendo a los Unimog de Mercedes-Benz.

Durango 1000

En 1987 la oferta se amplió con la pick up Durango 1000. Esta variante ofrecía características mecánicas y de equipamientos similares a la 4×4, pero disponía de tracción simple y una capacidad de carga de una tonelada.

Para el diseño de la Durango 1000, y por intermedio de Pedro Campo, Eniak recurrió a los servicios del estudio de diseño F&P Design (Gustavo Fosco y Guillermo Portaluppi), quienes instalaron un mini centro de diseño en la fábrica para desarrollar la nueva pick up y otros modelos que pensaba producir la empresa.

Durango_1000
La Durango 1000 era la versión con tracción simple y 1000 kilos de capacidad de carga.

El objetivo de los diseñadores era alejar la imagen del vehículo lo más posible de su origen Volkswagen/Dodge 1500. Trabajaron fundamentalmente en un rediseño del frontal – totalmente construido en fibra de vidrioincluyendo una nueva parrilla, paragolpes, faros y luces de posición. También se rediseñó el panel de instrumentos. En los laterales se incorporaron pasaruedas plásticos y una banda decorativa longitudinal.

El final

La fabricación de ambos modelos superó el centenar de unidades, una cifra moderada para una producción seriada. Sin embargo, algunas automotrices hicieron sentir su preocupación por el futuro desarrollo de este modelo y presionaron a los autopartistas para que le exigieran a Eniak cantidades mínimas a precios imposibles de sostener para una empresa mediana.

Acorralada por los costos, la fábrica debió cesar la producción de estos vehículos y, posteriormente, la de los Antique. Ello derivó en el cierre mismo de la empresa a comienzos de los años noventa y en el final de una valiosa experiencia independiente.