El Detalle

El Detalle OA 101

Durante tres décadas El Detalle S.A. fue sinónimo de carrocerías para el transporte público de pasajeros, en particular en el ámbito urbano. La compañía había iniciado sus actividades en los años 50 y a mediados de los 80 sostenía una consolidada posición de liderazgo con una oferta que se focalizaba en las típicas unidades de 21 asientos carrozadas sobre chasis derivados de camión, pero que de a poco se extendía hacia unidades frontales urbanas de mayor capacidad y buses de media y larga distancia.

La actividad de la carrocera cambió sustancialmente a partir del 30 de enero de 1987, cuando se le otorgó el carácter de empresa terminal automotriz. De este modo quedó autorizada para la producción de vehículos de transporte dentro de la categoría C. Así, El Detalle quedó habilitada para fabricar no solo carrocerías sino también el chasis, de manera que podía constituir en su establecimiento una unidad automotriz completa.

Aprovechando la experiencia de tantos años vinculados a la actividad junto a diversas empresas de transporte, se decidió encarar un proyecto más ambicioso y complejo. Se pretendía un vehículo que debía responder a las necesidades contemporáneas del transporte de pasajeros en ítems vinculados a la seguridad, economía y confort.

Por entonces, la industria se limitaba a montar carrocerías sobre rústicos chasis de piso alto y motor delantero que en la práctica eran mínimas adaptaciones para transporte de pasajeros a partir de chasis de camión.

La revolución del OA 101

El Detalle se propuso romper ese paradigma con un vehículo absolutamente novedoso. Nació así el OA 101, primer chasis nacional diseñado exclusivamente para el transporte de personas. Su robustez estructural respondía a las exigencias de los más variados caminos del país y confiaba su mecánica en el económico motor Deutz F6L 913, diésel refrigerado por aire y dispuesto sobre el eje trasero.

La altura baja y constante en diferencias condiciones de carga, facilitaba el acceso y descenso de los pasajeros de distintas edades y condición física. Su confort de marcha se debía a un exclusivo sistema de suspensión neumática en ambos ejes. En el delantero la configuración integraba dos amortiguadores y barras reactoras, mientras que en el trasero el sistema disponía de cuatro amortiguadores combinados con barras reactoras y una barra estabilizadora.

Las condiciones de manejo se optimizaban mediante el reducido radio de giro y una excelente visibilidad del tránsito y control de los pasajeros. Además, la ubicación trasera del motor aseguraba un óptimo rendimiento en la conducción, gracias a un bajo nivel de ruido interior, gases y calor que reducía la fatiga y la tensión del conductor.

Con tres alternativas de distancias entre ejes, se presentaba en tres versiones: urbano para 28 pasajeros, media distancia de 37 asientos reclinables y bodegas y servicio diferencial de 43 asientos.
La carrocería frontal evolucionó a comienzos de los 90 con la incorporación de las puertas dobles en el medio para mejorar el acceso y descenso. A finales de la década se conoció un remozado diseño de tendencias europeas. Sobre esa base se desarrolló una versión para media distancia. 

El piso bajo

A fines de los 90 y comienzos de 2000 comenzaron a aparecer en nuestro mercado ómnibus de piso bajo. El Detalle se anticipó a esta tendencia con el modelo OA 105, con el cual se inició otra etapa del transporte urbano en el país. De este modo, se daba un paso importante hacia la mejora del acceso y confort de los pasajeros. Estas unidades estaban equipadas con el motor diésel Cummins 6 CTTA 8,3 de 8.300 cc  y 217 hp.

El Detalle OA 105
Los OA 105 innovaron con su chasis de piso bajo y motorización Cummins.

Al mismo tiempo, El Detalle diseñó un midibus pensando en los transportistas que demandaban una alternativa más chica que el OA 101. Se trataba del OA 106, una unidad de poco más de 8000 mm de longitud impulsada por un Cummins 4B3.9 TAA de 3920 cc y 142 hp combinado con una transmisión automática Allison MT 643 de 4 marchas.

La buena demanda inicial se sostuvo durante la década de 1990, pero el nuevo milenio encontró a la fábrica con grandes dificultades financieras que comprometieron su continuidad. El Detalle se declaró en quiebra en 2006, luego de haber producido 5944 vehículos desde 1987.

Notas relacionadas:

El Detalle OA 101. Ver nota