Los primeros chinos argentinos

Desde hace unos años, las marcas chinas son una realidad en el mercado automotor nacional. Por el momento, la presencia se limita a la importación de unidades. Sin embargo, la década del 90 registra un antecedente de montaje de vehículos de ese origen en nuestro país. Fue una breve experiencia que aún no tuvo continuidad.

Los primeros chinos argentinos llegaron en los 90. Esa recordada década -con sus detractores y amantes- nos dejó una buena cantidad de acontecimientos en el ámbito automotor. Uno de estos fue la breve producción de utilitarios livianos y medianos de origen chino por parte de una empresa cuya razón social era Nakai Japan S.A.

Nakai era representante de Norinco, un coloso estatal chino que por entonces facturaba anualmente 24.000 millones de dólares, poseía 110 fábricas y ocupaba a un millón de personas. La empresa argentina importaba y distribuía motos y motores.

Norinco y Nakai establecieron un acuerdo comercial e industrial para fabricar en el país pequeños utilitarios de la marca china Chang’an que estaban basados en los antiguos Suzuki Carry de los años 80.

La fábrica se radicó en 1998 en la ciudad cordobesa de Alta Gracia y desde allí se proyectaba una producción de 10.000 rodados al año en la primera etapa para colocar en la Argentina y en el Mercosur, principalmente Brasil. Los motores y la mayoría de los componentes llegaban importados.

Durante el breve lapso que duró la experiencia, Nakai Japan S.A. montó dos modelos de similares características, pequeños utilitarios frontales con una capacidad de carga de 500 kilos impulsados por motorizaciones nafteras de menos de 1000 cc.

Para conocer más sobre los primeros chinos argentinos, ingresar aquí

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *